Por fin libre!

Por fin! Después de 40 días con la pata inmovilizada (35 con escayola) hoy nos hemos separado... pero no la echaré de menos porque ¡ya puedo andar! Con cuidadín claro, mirando por donde piso, por donde bajo y subo, sin correr, sin saltar,... pero a dos pies! :)

Todavía recuerdo el puñetero 27 de marzo por la tarde, que lejos pero que cerca me pilla. Tiene guasa que los tres esguinces que he tenido me los haya hecho en la misma zona: 2 yendo para el poli (los de la escayola) y uno en pleno partido (este en una semana se fue... creo). Rezaré a algo o a alguien para que nunca llegue el cuarto... ><.

Ahora, mes y medio después, soy libre... Eso sí, después de todo ese tiempo cojeando, alguien me tiene que recordar como se anda, pasito a pasito.

Mmm...

Cris...? XD

Nos vemos!